En alguna parte de la selva se encontraban muchas aves, cada una emitía un particular sonido y cánticos a la vez. Llamaban la atención de sus visitantes y algunos realmente causaban sensación. Una corneja, ave parecida a un búho pero más pequeña, estaba molesta, observando a los cuervos deseaba ser como ellos, sabía que ellos presagiaban a los hombres el futuro, por eso era que les daban tanto crédito llamándolos para que sean sus testigos si fuera necesario. Sentía gran envidia y estaba dispuesta a hacer cualquier cosa con tal de intentar parecérsele a un cuervo.
Una mañana la corneja volaba de árbol en árbol buscando donde acomodarse, de pronto vio pasar unos viajeros y pensó que esta era una gran oportunidad de engañarlos imitando a un cuervo se puso en uno de los árboles y se le ocurrió lanzar gritos muy fuertes asustando así a los viajeros tratando de espantarlos haciendo que por el miedo retrocedan apunto de irse del lugar pero uno de Los viajeros que conocía del sonido de las aves les dijo a sus compañeros:
Amigos tranquilos, no pasa nada cálmense esa ave es sólo una corneja no se asusten, ella sólo grita pero no son presagios de ninguna manera no va a suceder nada cálmense. Ella Sólo quiere parecerse a un cuervo esta tratando de imitarlo y como verán no puede.
Cuándo te dejas dominar por la envidia y no estás preparado para rivalizar con alguien que si esta capacitado, no sólo no vas a poder igualarlo, sino que además puedes quedar en gran ridículo.
¡Sé el primero en comentar!