En una casa cualquiera, una pareja de jóvenes se acababa de casar y su mayor sueño era tener niños. Para la pareja, su mayor ilusión era formar una familia juntos y eso lo demostraron por el increíble cariño que tenían por sus hijos, mucho antes incluso de que estos nacieran.
Los deseos de la pareja de tener bebés fueron tan grandes, que cuando se quedaron embarazados lo hicieron de mellizos, por lo que la mamá tendría un niño y una niña.
Ambos niños nacerían en un lugar lleno de amor y cariño, con todo lo que un par de niños pequeños puede desear para ser feliz.
El día de su nacimiento, se preparó una gran fiesta con todos los familiares y con el paso de los meses, los niños comenzaron a crecer. Sus padres, siempre les dieron amor y cariño y los llenaron de ternura, sin embargo, durante toda su vida, tuvieron muchas limitaciones, no porque sus padres no pudiesen darle todo lo que pedían, sino porque ellos intentaron por todos los medios que ambos niños aprendieran a tolerar las frustraciones cuando se les decía que no a algo y sobre todo, enseñarles que realmente cuesta mucho cuando quieres algo.
A medida que pasaban los meses y los niños crecían en un hogar acogedor y lleno de cariño sin embargo, comenzaron a sentirse un poco tristes, ya que veían que sus amigos podían tener todo lo que pedían, sus padres les compraban todos los caprichos y cuando regresaban de sus largo viajes después de meses sin estar en casa, les traían los regalos más costosos.
Durante mucho tiempo, los niños de nuestra historia, no se sentían queridos ni valorados por sus padres a pesar de que sus padres volcaban todo el cariño que podían en ellos.
Cuando los niños comenzaron a crecer y llegaron casual final de su adolescencia, ya eran dos hermanos con un mucha integridad y que se ganaban la vida honradamente para conseguir las cosas que querían, sin embargo, sus amigos no. Nunca habían aprendido a trabajar con el “No” como respuesta o a no tener lo que querían, por lo que se volvieron personas muy infelices cuando llegaron al mudo real fuera de casa.
Ambos niños entendieron entonces el increíble cariño que le habían dado sus padres durante todos esos años, ya que les habían privado de algunas cosas para hacerles entender cuando crecieran que lejos de casa, tienes que esforzarte para conseguir las cosas, ya que nadie te las va a regalar.
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