En un país lejano del África, existen muchos niños muy pobres. En una ocasión un grupo de turistas se acercó a un niño llamado Mupy mientras jugaba. Uno de los turistas se conmovió; quiso congraciarse con Mupy y compartir algo de lo que tenía y le dijo al niño: «¿Qué te parece si hacemos un juego para ti y tus amigos? Yo tengo unos dulces que sólo se lo puede ganar uno de ustedes». Si todos corren hacia aquella casa, el primero que llegue y toque la pared, ese gana ¿qué dices?».
El pequeño Mupy pensó un momento y dijo: «Muy bien, eso será muy fácil». Mupy habló rápidamente con sus amigos, se tomaron de la mano todos y a la voz de 3 corrieron juntos y …¡todos llegaron a la vez! Sorprendido el turista por la ocurrencia del niño, le preguntó: «¿Por qué hiciste eso? Sólo tenía que ganar uno de ustedes».
«Sí, lo sé. Pero yo no podría comer sólo y sentirme feliz mientras mis amigos me miran tristes. No sé cómo serán los niños en su país, pero aquí hemos aprendido desde pequeños que todos somos para uno, y uno es para todos. Aunque tengamos poco, lo que podemos lo compartimos como hermanos y así nos sentimos mejor»,dijo Mupy.
Muchas veces, los niños que son más pobres, pueden valorar más las cosas. Enseñémosles a los niños a compartir las cosas y a no ser egoístas.
Gracias me sirvió de mucho el cuento pero ¿podrían dejar una enseñanza por favor?
Hola Lola. Hemos agregado la moraleja para que sea más fácil la síntesis. Pero en muchos cuentos, la enseñanza (moraleja) está implícita (sobrentendida). Saludos.
el cuento esta muy hermoso y que niño tan listo y generoso.
esberda lo q dice el niño si se amos pobres no hay q compartir con los demas asi nos sentimos iguales
esta lindo y conmovedor
Muy buena enseñanza para los niños que aprendan a compartir